jueves, 18 de febrero de 2010

La angustiosa envidia

De una gota de rocío nació una blanca flor
conforme pasaban los años,esta iba cogiendo tonos rosados.
Con la escarcha de la noche se iba haciendo mayor
y sus pétalos iban cogiendo colores irisados.
Superaba los veranos ahogándose en el calor.
El viento mecía su tallo y el hielo la hería con sus afiladas agujas,
luego llegaba el invierno y no lo pasaba mejor,
el resto del año era confidente de duendes y brujas.
Se sentía poseedora de una belleza especial,
ignoraba que en segundos se acabaría su cuento,
cuando por fin descubriera que la vida era casual
y que todo lo vivido era tan solo un momento.
Paseando,una señora,se ha fijado en la rival
disimulando su ira se dedicó al planteamiento
como hacer para vengarse de aquella enemiga potencial
la arrancaría del jardín con disimulado movimiento.
Se moría,su vida acababa en un abismo
La señora al caminar,iba pensando
en comprar un bonito jarrón,allí mismo.
Se solazaría con la mustia belleza,encajonando,
a aquel ser que le robó protagonismo,
de su cabeza,una idea iba brotando
sin darse cuenta de aquel triste antagonismo.
Lo que en verdad en la gente estaba causando,
la admiración de dos bellezas con mutismo
la conjunción de dos beldades juntas caminando.

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